V.I. Lenin

1900

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N. K. KRÚPSKAIA Y V. I. LENIN A LA MADRE DE LENIN M. A. ULIANOVA

 



Escrito:  el 19 de enero de 1900. Enviada de Shúshenskoie a Moscú.
Publicado por primera vez: En 1929 en la revista Proletárskaia Revoliutsia, núm. 4.
Fuente del texto: Editorial Akal, Obras Completas, Tomo 41.
Preparado para el MIA: Rodrigo Cisterna, mayo de 2016


 

 

19 de enero.

Querida María Alexándrovna: Por fin se aclaró el problema: podemos ir a Rusia; no se prevé que prolonguen el destierro. El día 28 expediremos las cosas, y el 29 nos pondremos en camino. Tendremos compañía, V. V. y Olga Alexándrovna. Los Lepeshinski también pensaban viajar, pero dudo mucho de que estén preparados a tiempo. O. A. se apresura para encontrar a M. A., que ha sido enviado a Riga; también V. V. se apresura. Más o menos para el 30 podremos salir de Minus. Lo único que temo es que por mi causa se produzca algún retraso. Sólo hace poco nos dimos cuenta que debíamos averiguar si yo tendría que pedir autorización para viajar por cuenta propia. V. V. preguntó al funcionario policial y descubrió que la solicitud debía presentarse al Departamento de policía, ya que el funcionario local no puede entregarme un permiso de viaje porque no ha recibido instrucciones sobre mí. Enviamos hoy un telegrama al Departamento de policía y otro a los Knipóvich, pero es casi seguro que surjan nuevas complicaciones [1]. Volodia quiere quedarse un par de días en Ufa, hasta que sepamos si deberé quedarme en Ufa o si piensan mandarme a Sterlitamak o Belebei. No hacemos más que hablar del viaje. Los libros están encajonados; los pesamos: llegan a quince puds. Los enviaremos por trasporte, junto con parte de nuestras cosas. No creo que tendremos tantas cosas. Debido a las heladas, queríamos conseguir un trineo cubierto, pero no lo hay en toda la ciudad y encargar uno aquí es arriesgado, probablemente no duraría hasta Achinsk. Tenemos bastante ropa de abrigo, así que no creo que nos congelemos, y el tiempo parece estar poniéndose más templado. Oskar dice que vio una nubécula, y esta mañana había sólo 28 grados bajo cero. Lo que nos inquieta es que mamá está siempre resfriada y ha vuelto a toser. Volodia y yo salimos todos los días pese al hielo, y estamos acostumbrados al aire libre, pero no sé cómo soportará ella el viaje. Quisiera que llegara pronto el 29, ya que nos vamos, vayámonos. El día de la salida parece tan cercano que hoy mamá quería empezar a preparar pelmeni [2] para el viaje. Nos aconsejan llevar pelmeni para comer en el camino, todo lo demás se estropea con el frío. Mamá piensa preparar montones, sin grasa ni cebolla.

Leemos poco. Volodia escribe un artículo para replicar a Skvortsov [3]. Hoy enviaremos, por fin, la obra de Webb; debo decir que nos cansó totalmente.

Bueno, hasta pronto. La beso fuertemente. También beso a Maniasha y a Aniuta. Es una lástima que no podré ir a Moscú, Saludos de mamá.

Suya, Nadía.

Probablemente recibirás esta carta después de un telegrama mío. Espero que nos veremos pronto.

Tuyo, V. U.

(Me enteré [escribió A. N.] que la censura ha rebanado (!!) el libro de Prokopóvich. Quiere decir que no puede contestarle. ¡Un hecho muy extraño!) [4]



[1]Ese mismo día, 19 de enero de 1900, N. K. Krúpskaia solicitó a la administración de la provincia de leniseisk que se la autorizara a viajar a Ufa costeándose ella el viaje. El 29 de enero, sin esperar la autorización, Nadiezhda Konstantínovna salió de Shúshenskoie junto con Vlaclímir Ilich. Recibió el permiso de viaje estando ya en Minusinsk.

Los Knipóvich eran íntimos amigos de Nadiezlida Konstantínovna. (Ed.)

[2] Pelmeni: especie de ravioles rellenos con carne. (Ed.)

[3] Se trata del artículo de Lenin "Una crítica no crítica (A propósito del artículo del señor P. Skvortsov 'El fetichismo mercantil' en Naúchnoic Obozrenie, húm. 12 de 1899)". Véase V. I. Lenin, ob. cit., t. III. lEd.)

[4] El libro de S. N. Prokopóvich E1 movimiento obrero en Occidente. Experiencias de una investigación analítica. T. I., Geimama, Bélgica, fue retenido el 22 de mayo de 1899, por disposición del presidente de la Comisión de censura de Petersburgo, y posteriormente su aparición fue autorizada por el jefe de la Dirección Central para Asuntos de Prensa. Apareció a fines de enero de 1900. Lenin escribió un comentario sobre el libro. (Véase V. I. Lenin, ob. cit., t. IV, págs. 185-195.) (Ed.)