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Escrita: El 27 de diciembre de 1897.
Enviada de Shúshenskoie a
Moscú.
Primera publicación: En 1929 en la revista Proletárskaia Revóliutsia,
núm. 2-3.
Fuente del texto: V. I. Lenin, Obras completas,
Editorial Akal, tomo 41.
Preparado para el MIA: Rodrigo Cisterna, marzo de
2014.
27/XII.1897.
Llegó el dinero, querida mamita, tanto la primera como la segunda cuota (es decir, del 16.XI y del 8.XII). Ahora recibimos regularmente la asignación, de modo que, en este aspecto, las cosas están normalizadas y pienso que por un tiempo ( relativamente largo) no recesitaré contribuciones extras.
Hace varios días que vive conmigo Gleb, quien obtuvo autorización para un viaje de diez días aquí. Lo pasamos magníficamente y paseamos mucho, porque el tiempo es casi siempre muy templado. Excepto un día, en que la temperatura llegó, según dicen, a 36 grados R [*] (hace una semana y media), y de varios días con ventisca ("de tiempo", como dice la gente de aquí), los días han sido muy templados y nos dedicamos con entusiasmo a cazar... pero sin mucha suerte. ¿Qué más puede esperarse del invierno? Los paseos, en cambio, son agradables. Debido a las fiestas no salió el correo el miércoles de esta semana ni vino el correo del viernes; es la tercera vez que no hay correo desde que vivo en Shush. No es mucho. Gracias a mi huésped, apenas lo noto. ●
Te beso fuertemente. Tuyo, V. U.
Envío un artículo para la revista. Sería bueno hacerlo llegar rápidamente; quizás estarás a tiempo para el número de enero [**].
Gleb manda saludos. Me pide que le diga a Maniasha que confía en tener mucho que discutir con ella.
Para Maniasha
No te empeñes tanto, Maniasha, por Shtangue; es muy probable que me haya equivocado. ¡Cómo podía acordarme después de tantos años! Has encontrado un artículo, de manera que podemos considerarnos afortunados. Se me ocurrió incluso que el segundo artículo no había sido publicado en Ekonomícheskaia Zhurnal, sino en Siéverni Viéstnik, en 1891 (por lo menos hace poco lo encontré citado en alguna parte). De cualquier manera, no hay necesidad de revisar todo Ekonomíscheski Zhurnal hasta 1885.
En cuanto a tu visita, me alegrará mucho. Las cosas son ahora diferentes, y no tengo motivos particulares para oponerme. Si esperas la salida de los barcos que van por el lenisei, puedes hacer el viaje sin grandes inconvenientes. Es muy posible que venga también Nadiezhda Konstantínovna: el problema se re solverá seguramente pronto; tal vez esté resuelto cuando leas esta carta. Si la autorizan a elegir Shu-Shu-Shu como lugar de destierro, en vez del norte de Rusia, no la autorizarán, como es natural, a aplazar el viaje hasta la primavera y tendrá que viajar en seguida.
Un apretón de manos. V. U.
Recuerdo que Mark me escribió una vez preguntándome si quería que me consiguiese un perro de caza en Moscú. Entonces mi actitud fue muy fría, pues contaba con mi Pegaso, pero me ha engañado ignominiosamente. Ahora aceptaría gustosamente ese plan, por supuesto, pero por lo que puedo ver, es puramente utópico y no vale la pena. El traslado es muy caro. A Gleb se le ocurren ideas fantásticas: |tomar un cachorrito y traerlo en un cesto! Nos hemos reído con ese plan, que, por supuesto, es apenas algo mejor que cualquier otro. No, lo que pasa simplemente es que Mark se dejó arrebatar por la imaginación: por esta posdata podrás ver qué trivialidades ocupan a veces la atención de los habitantes de Shu-Shu-Shu y Te-te-tes.
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[*] Esta temperatura en escala Reamur equivale a 45° Celsius. (Ed.)
[**] Es el artículo "¿A qué herencia renunciamos?" (véase V. I. Lenin, ob. cít., t. II), escrito para Nóvoie Slovo, que ya había sido clausurada por el gobierno. El artículo apareció después en la colección Estudios y artículos económicos. (Ed.)